jueves, 24 de agosto de 2017

Space Hulk

Partida rapida de Space Hulk utilizando sólo las reglas de "Deathwing", sin híbridos ni psíquicos.
Generamos un escenario aleatorio utilizando el método del manual de "Deathwing":


  • Pujamos el número de puntos a emplear de marines. El que puja menos juega marine y genera escuadras con esos puntos. En este caso pujé 20 puntos que me dio para dos escuadras básicas con lanzallamas de apoyo.
  • Generamos el escenario aleatoriamente: Un "raid" atacando una unidad de criogenización.
  • Generamos la fuerza de Genestealer: 20 blips que aparecerán a 2 por turno.
Y al ataque.


Como es habitual, los marines llega un punto en que están rodeados y algo falla. (Generalmente una sucesión de encasquillamientos pese a la letal cobertura dispuesta).

En ese momento ya no hay nada que hacer cuando te rodean bichos por todas partes.


Maravilloso juego. Creo que el más divertido y de reglas más ajustadas que editó Games Workshop en su era dorada.

lunes, 21 de agosto de 2017

Guerra de las Rosas. Warhammer Ancients

Variando la temática de las partidas habituales y a la espera de que la recluta de romanos y cartagineses permita una buena batalla, ponemos sobre la mesa las magníficas figuras de perry miniatures de Ángel para echar una batalla de guerra de las rosas.

Ambos ejércitos son muy parecidos. La caballería pesada extra-acorazada es la reina del campo. Le acompañan caballeros desmontados y numerosos hombres de armas con alabardas. El otro factos importante son los arcos largos, que ya suponíamos causarían estragos hasta llegar al contacto.



En la foto no se aprecian bien las colinas. El bando atacante cuenta con una buena posición con colinas a los flancos desde la que los arqueros pueden disparar con ventaja. Así pues el defensor , con la aldea a su espalda no se atrevió a moverse permaneciendo quieto y acribillando a las filas atacantes en su avance.


Aquí vemos a los arqueros defensores acribillando el avance enemigo, con caballeros y hombres de armas en reserva esperando:


La caballería defensora se movió flanqueando el bosque del ala izquierda atacante intentando el flanqueo. Aquí vemos a los arqueros en la colina que se ven amenazados por este movimiento envolvente. 


Pero los arqueros pudieron maniobrar dándose la vuelta y aguantaron la carga de la caballería ligera, la cual volvió grupas y huyó rechazada.


Aquí el resto de la caballería defensora amenazando el flanco de ataque de los caballeros y la línea atacante:


 Una preciosa panorámica de la batalla:


La línea atacante arrolla a los arqueros que tratarían de aguantar la primera embestida aunque sólo sea para permitir el contraataque de su infantería pesada en reserva.
Aunque no tenían ninguna esperanza de aguantar lucharon valientemente siendo diezmados por la carga de los caballeros, si bien estos perdieron su ímpetu y su capacidad de derrotar automáticamente al enemigo.


Por desgracia, los defensores no fueron capaces de contraatacar y en la persecución a los arqueros, los caballeros chocaron con la línea defensora que resultó sorprendida y desbandada.
Esta acción logró rompre la línea sin dar tiempo a reaccionar a los defensores que resultaron "rotos" y derrotados.


Una lástima para los defensores que no pudieron aguantar ni un poco, pese a la presencia del general y su estandarte para potenciar la moral y el aguante a la espera de la carga por el flanco de los caballeros que hubieran podido salvar el día.

No pudo ser y la defensa se desmoronó.

Bonita partida fuera de lo habitual para nosotros, con dos poderosos ejércitos muy similares con iguales fortalezas y debilidades. Lo mejor de todo las figuras y los vistosos estandartes. Habrá que repetir otro día.

jueves, 6 de julio de 2017

OLDHAMMER en jornadas de puertas abiertas CLUB DRAGÓN

Entre mucho jaleo, mercadillo, encuentros y mkuchas distracciones, fuimos llevando una pequeña partidita de Warhammer Fantasy Battles 3ª edición.

Un malvado nigromante invade con sus pútridos artificios arrebatados a la muerte, una comarca del imperio. Un contingente de piqueros y caballeros tratará de detener esta invasión.



Las horrorosas fuerzas del nigromante no conocen el miedo a morir. Espantosas figuras de Angel (en el buen sentido, claro):


Defendiendo las fronteras del imperio los gallardos caballeros y las modernísimas tropas de piqueros y mosqueteros de "Fer", siguiendo las novedosas y racionales doctrinas de la guerra contemporánea en el viejo mundo:


Los arcabuces escupen fuego aunque demuestran que estos diseños necesitan todavía pulirse más. Varios de estos artefactos explotan en las manos de sus desdichados manipuladores y van a causar tantas o más bajas entre sus propios usuarios que entre el enemigo.

Quien tuviera las viejas y buenas ballestas y no estos chismes del demonio (De Khorne, por supuesto, que debe estar solazándose contemplando la batalla).

Cuando regresen (si pueden) a Altdorf,  le comentarán al sabio y docto diseñador de estas armas las pequeñas deficiencias observadas y en qué lugar de su anatomía puede albergarlas hasta que funcionen correctamente.


El malvado nigromante, no sólo es un experto en las artes de resucitar a los muertos, también domina otras formas de magia. Una espesa niebla será conjurada alrededor de los caballeros que quedarán perdidos y confundidos dentro sin poder atacar a los esqueletos montados.

Con la caballería imperial perdida, los jinetes de la muerte rodean a las fuerzas imperiales.


Mientras los zombies y esqueletos avanzan contra la muralla de piqueros:


La lucha es feroz y sin cuartel. Los piqueros mantienen la compostura al ver que la misma muerte se les echa encima.
Pese a que parezca fútil tratar de matar a quien ya ha estado muerto, las picas logran contener a las hordas mortíferas, las cuales parecen perder su fuerza.

La magia del nigromante que mantiene en pie a los finados parece desvanecerse e inestabilizarse. Aunque las cuchillas de las picas atraviesan carne putrefacta sin aparente efecto, los esqueletos se desmoronan por doquier como por arte de...ejem, falta de magia.


Los intrépidos guardas forestales imperiales vigilan desde los aledaños del bosque lanzando dardos sobre todo lo que se pone a tiro.
Quizá hubieran sido más eficaces en otro punto del campo de batalla y no aquí viéndolas venir.


Por fín, los caballeros logran salir de la niebla y enfrentan a los jinetes del apocalipsis:


Cuando la gallarda caballería debería romper los huesos descarnados de los no muertos, algo inquieta a los valientes paladines. ¿Qué ocurre? ...Un rumor... ¿Qué nuevo horror nos acecha?...¡Huyamos, sálvese quien pueda!

Mientras el combate sucedía, unos zombis atacaron la retaguardia de los caballeros imperiales. Pese a la legendaria valentía de estos adalides del imperio, la confusión y el terror se apoderó de sus filas y huyeron despavoridos.


Huyendo la caballería, el ejército imperial pierde la cohesión y la confianza, pese a que la batalla la tenían casi ganada.

Con la huida de los caballeros las hordas de la muerte se avalanzan sobre el imperio ya sin oposición:



En fin. Como suele suceder en estas partidas, nunca se puede dar por hecho nada. Una tirada de pánico mal dada puede cambiar la suerte de una batalla.

En definitiva, la magia del nigromante fue muy efectiva retrasando la caballería en la niebla. Y los zombies pudieron atacar por retaguardia mientras que los forestales estaban en los bosques sin prestar ayuda.
Los arcabuces resultaron ineficaces y tan letales entre las propias filas como entre el enemigo.
Las picas pudieron rechazar a  dos unidades de muertos vivientes.
Pero los esqueletos son capaces de aguantar hasta que no queda ni uno. No huyen nunca y las tiradas de inestabilidad son como la ruleta ruso. Igual eliminan la unidad como la vuelven a la vida para desesperación del enemigo.


Pequeña, pero interesante partida.