domingo, 10 de agosto de 2014

Warhammer 40K Rogue Trader. "First Blood"


Después de mucho tiempo retomamos el WH40K donde lo dejamos. Orcos y Marines espaciales midiéndose en el campo de batalla.
Hace mucho tiempo que no jugamos una partida. Ha pasado mucho tiempo y hemos jugado a infinidad de reglamentos, de modo que es natural que este viejo WH40K esté algo oxidado. Pero el recuerdo de sus miniaturas y su trasfondo sigue teniendo algo que ningún juego a vuelto a lograr. En cuestión de figuras e imágenes el juego permanece tan evocador como siempre. La cuestión del mecanismo de juego... pues no tanto.
Pero asumiendo lo arcaico de este juego volvemos a poner encima de la mesa a los viejos orcos espaciales y a los marines del espacio.



No hemos preparado el escenario ni hemos elucubrado una historia que ilustre o enriquezca la partida. ¡Grave error!
No hay nada más absurdo que una partida de figuras en la que pones a ambos contendientes uno enfrente del otro en extremos opuestos de la mesa para pegarse sin aparente motivo. Por más que este suele ser el tipo habitual de partidas que se ven en los clubs de juegos. Y el que WH40K no ha hecho más que fomentar con los torneos, sus libros de ejércitos, codex y demás absurdeces para sacar el dinero a los críos y a los cuatro fieles (y acaudalados) seguidores que puedan quedarles.

Lo mejor es que ponga unas cuantas fotos y luego hable de la batalla.



Esta miniatura es sensacional. Todo un engendro mecánico que lo he utilizado como un dreadnought diseñado según las reglas del "Compendium" para ser una plataforma de combate letal.


El gran Warnaster Orco, con su armadura de potencia. Esta miniatura la he elegido como jefe orco por su armadura y aspecto de gran caudillo. Pero no es de mis favoritas. De hecho creo que la pose es muy estática y es el prototipo de las figuras malas de GW con pose de "culturista sacando molla".


R´orc´mel. El Zorro del Desierto de Nueva Rynn. Estas figuras sí que son irrepetibles. De lo más grande que ha parido GW.



La cuadrilla de becarios gretching. Otra de mis debilidades. Los goblin, gretchin, snotling y demás renacuajos verdes.


No. No es un gazapo de otra partida de WHFB. Son un grupo de gretching armados con arcos y equipamiento primitivo para servir de escudos vivientes en el avance.


La horda orca avanza.


Un Dreadnought imperial


El médico imperial equipado con "power-tiritas".










Sobre la partida, como no hay un escenario preparado ni comento su desarrollo. Basta decir que los orcos pegaron fuerte a los Space Marines. Estos no se desmoralizaron (que para eso son los adalides de la galaxia) pero su jugador sí, que decidió que no tenía nada que hacer y se retiró.

Reflexiones sobre el juego y la batalla:

1.- Hay que preparar un escenario. Ponerse uno delante del otro es una chorrada sin ningún interés.
2.- El juego sigue siendo una simpleza carente de toda sutileza táctica. En realidad, lo sangrante es que WH40K es la misma chorrada en cualquiera de sus posteriores ediciones. En ninguna hay mecanismos de mando o moral que hagan un reflejo más fiel del manejo de tropas a escala de pelotón. En esta primitiva edición el mecanismo es un poco tosco. Especialmente en lo relativo a la fase de movimiento de reservas. Esta fase desde siempre, recuerdo que se evitaba y que directamente se movía en sucesión al movimiento cuando la figura no iba a disparar posteriormente.

Como el resultado no ha sido del todo satisfactorio, trataremos de preparar un escenario para otra ocasión y repetir la experiencia.




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