Con la vuelta de vacaciones he traído unas tremendas ganas de jugar y pintar. Los proyectos se amontonan en la cabeza y nada más aterrizar en casa ya tenía programada una visita a la tienda para comprar figuras para un ejército para las guerras de italia.
Pero antes de esta salida, un vistazo al despacho donde pinto me ha atizado en la cara la indecente cantidad de figuras de fantasía sin pintar.
Suelo estar al día y pintar todo lo que compro...excepto con fantasía. La cola de figuras de fantasía sin pintar es interminable. Y con la fantasía nunca soy sistemático. Pinto intermitentemente cuando me apetece. Pero no con un proyecto serio.
El caso es que cualquier proyecto nuevo va a quedar un poco en suspenso para darle un pequeño empuje a la fantasía y al menos limpiar la mala conciencia. Solo un poco.
Y lo promero que he pintado han sido muertos vivientes.
Un ghoul: